Mucho se ha escrito, incluido este blog, sobre los tres pilares en los que supuestamente se fundamenta la hipertrofia muscular. Cursos, material de estudio universitario, profesores, autores, investigadores, etc. Todos han dado por buena una teoría que trata de argumentar que la hipertrofia es el producto de una ecuación donde las variables son tensión mecánica, estrés metabólico y daño muscular olvidándose de que es eso, una teoría.
La teoría hormonal en la que se basa el estrés metabólico hace años que está en entredicho y ya casi nadie le aporta la más mínima credibilidad. Antes se creía que el entrenamiento más efectivo era aquel que generaba una mayor secreción post entrenamiento de ciertas hormonas con capacidad para estimular la síntesis proteica como Testosterona e IGF-1. Esto, seguramente por interés, se abrazó durante años puesto que permitía estudios más cortos y baratos. Una perita para los investigadores y universidades que vieron que, ante mismo tiempo y presupuesto anual se podían realizar y publicar más estudios. Si a esto le añades que existe la tendencia de relacionar número de estudios publicados y prestigio de un investigador ya tienes el cocotal perfecto. Conforme estudios de mayor duración y nivel de evidencia se fueron publicando, se observó que no había relación entre la secreción hormonal post entrenamiento y la efectividad de un sistema de entrenamiento y que, además, dicha secreción era tremendamente personal, convirtiéndolo en una variable prácticamente irrelevante. Todas las conclusiones de tantos estudios, que fueron conformando una evidencia, tuvo que desecharse al basarse en una premisa errónea.
Con el daño muscular puede estar pasando lo mismo, aunque no tenemos una evidencia tan sólida de que así sea. El daño muscular se ha relacionado con un aumento de la hipertrofia muscular al considerarse que estimula la síntesis proteica así como la proliferación y especialización de células satélite y la verdad es que así es. El problema es que no tenemos evidencia de que esto vaya más allá de la mera reparación del tejido dañado. Considerar, por tanto, que esta proliferación y especialización de células satélite ayuda a generar más masa muscular una vez se ha reparado el daño es una teoría sin contrastar.
Otro de los puntos en los que se basa la relación entre daño muscular e hipertrofia es el aparente incremento de la sección transversal del músculo cuando hay daño muscular. No obstante, se ha demostrado que el daño muscular provoca una edema, y que el edema muscular aumenta la sección transversal. Los medios actuales pueden medir con gran precisión el incremento de la sección transversal pero no si ésta se ha producido por un aumento del número de sarcómeros en paralelo (hipertrofia muscular real) o del propio edema. Además, en individuos entrenados, no se ha observado que aquellas personas con mayor facilidad para generar daño muscular obtengan una mayor ganancia de masa muscular, y lo mismo ocurre con los ejercicios o metodología de entrenamiento que así lo posibilita.
Por todo esto, una revisión publicada en Diciembre de 2017 en el European Journal of Applied Physiology y titulada “The development of skeletal muscle hypertrophy through resistance training: the role of muscle damage and muscle protein synthesis” concluye diciendo que el daño muscular no puede, en base a la evidencia actual, considerarse un factor determinante en la hipertrofia muscular.
REFERENCIAS
Damas F, Libardi CA, Ugrinowitsch C. The development of skeletal muscle hypertrophy through resistance training: the role of muscle damage and muscle protein synthesis. Eur J Appl Physiol, 2017
La entrada ¿Existe realmente relación entre hipertrofia y daño muscular? aparece primero en El blog de fitness.
via El blog de fitness http://blogs.menshealth.es/fitness/existe-realmente-relacion-entre-hipertrofia-y-dano-muscular/
Buenas me gustaria saber si es posible hipertrofiar con esto estoy apunto de comprar pesas rusas para empezar mi entreno en casa
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