Acaban de terminar las navidades, te subes a la báscula y miras con horror como los números se disparan y marcan una cifra demasiado alta... Literalmente te has hartado a comer, y ahora viene lo más duro: con ese sentimiento de culpa por no haber medido las calorías ingeridas, has hecho propósito de año nuevo y decides apuntarte al gimnasio.
Pero en el gimnasio no te gusta trabajar con pesas o máquinas, y decides echarle un vistazo a la oferta de clases colectivas disponibles, bien porque todo el mundo te ha hablado muy bien de ellas o bien porque son una buena mezcla de entrenamiento y diversión, pero no sabes cuál es la mejor alternativa... Hoy te hablamos de las más populares para que tengas una ayuda en tu elección.
Spinning: dar pedales nunca fue tan divertido
No, el spinning no es "montar en bicicleta en el gimnasio mientras escuchas música", además de requerir de cierta técnica postural para evitar dolores de espalda, lo cual suele ser fácilmente evitable regulando las alturas tanto del sillín como del manillar.
Antes de que la desesperación te pueda y abandones el primer día, debes saber que el spinning es una de las clases que más agotado pueden dejarte, especialmente si estas falto de forma. Por ello, lo más normal es que en tus primeros días salgas empapado en sudor y casi sin poder ni hablar, pero es una de las clases en las que más "sentimiento de grupo" suele haber y los ánimos por parte tanto del monitor como de los que te rodean suelen ser constantes (sobre todo cuando detectan a alguien novato en estas clases).
Si te gusta entrenar con la música a todo volumen, buscas trabajar tu tren inferior y mejorar tu resistencia cardiovascular principalmente, deberías probar las clases de spinning. De promedio, en una clase de spinning puedes quemar alrededor de unas 300-350 calorías.
Body pump: usando pesas en las clases colectivas
A pesar de que el body pump y algunos de sus "derivados" como pueden ser el super pump o el power pump incluyen el trabajo con pesas, la estructura de la clase no va a hacer posible la inclusión de grandes pesos.
Por norma general, las clases de body pump suelen durar en torno a una hora, incluyendo calentamiento previo y vuelta a la calma posterior, por lo que el periodo dedicado a la rutina de ejercicios puede oscilar entre los 40-45 minutos. Además, esta clase colectiva se basa en una rutina full body, lo cual quiere decir que vamos a trabajar todo nuestro cuerpo en cada sesión.
Los ejercicios suelen ir de forma encadenada, es decir, en superseries y los periodos de descanso suelen ser muy breves (en ocasiones el periodo de descanso se reduce al tiempo necesario para cambiar o ajustar los pesos para el siguiente ejercicio). El principal beneficio que obtendrás a través de estas clases es la tonificación de tus músculos y, a medida que vayas ganando forma física y te vaya siendo más sencillo completar las clases sin morir en el intento, tu autoestima irá también en aumento.
Si eres de esas personas tímidas que no se atreven a ir a la sala de pesas o no te gusta tener que estar esperando para que quede libre una máquina o una barra o mancuerna, las clases de body pump pueden serte de gran utilidad. La quema de calorías en una clase de body pump puede rondar entre las 250 y las 400 calorías.
"Todo-box": mezclando el ejercicio cardiovascular con las artes marciales
A pesar de que la modalidad más conocida de las clases que mezclan artes marciales y ejercicio cardiovascular es el popular Body Combat (especialmente en aquellos gimnasios que tengan actividades de Les Mills), dentro de esta clasificación podríamos encuadrar actividades como el fit-box, el power-box, kickboxing, etc...
En este tipo de clases, el objetivo final es trabajar de forma principal nuestra capacidad cardiorespiratoria a través de los movimientos, golpes y finta que iremos realizando durante la clase. Es importante señalar que aunque se practiquen golpes y fintas de disciplinas de artes marciales, no estamos en una clase de defensa personal.
Si os gustaría en un futuro probar a practicar algún deporte de contacto, pero no os atrevéis aún por miedo a recibir muchos golpes, podéis iniciaros con una de estas clases.
Yoga y pilates
A pesar de lo que mucha gente pueda llegar a pensar, las clases de yoga y pilates pueden hacerte sudar. Y mucho. A pesar de que sus movimientos se realicen de forma mucho más controlada que los ejecutados por ejemplo en una clase de cardio-box, tanto el pilates como el yoga van a poner a prueba todo nuestro cuerpo desde diferentes puntos de vista: fuerza, agilidad, equilibrio, elasticidad...
Dependiendo de la escuela en la que vuestro profesor haya realizado su formación, podéis encontrar diferencias entre una clase y otra, aunque la base que se respeta es la del fundador de esta disciplina, Joseph H. Pilates, la cual data del año 1912.
Y del mismo modo que en pilates existen diferentes tipos, cuando hablamos de yoga nos encontramos con otro abanico de opciones entre las que elegir: Hatha (la opción ideal para aquellos que se inician en el mundo del yoga, y las más habitual de ver en gimnasios y centros deportivos), Vinyasa (si queremos ponernos en forma a través de la práctica del yoga, el Vinyasa o Vinyasa Flow Yoga es la mejor opción, ya que trabajaremos nuestra fuerza, flexibilidad y capacidad de concentración), Kundalini (es una estilo de yoga que nos permitirá, a través de la conocida como "respiración de fuego", eliminar los sentimientos negativos de nosotros), Bikram (su principal característica es que se practica a altas temperaturas, llegando a alcanzar los 42 grados y su objetivo fundamental es el de estirar músculos, ligamentos y tendones), AcroYoga (modalidad de yoga para practicar en parejas que combina el yoga con acrobacias y nos permite trabajar la fuerza y la flexibilidad además de fortalecer la confianza en nuestra pareja), SUP Yoga (se practica sobre una tabla de surf, por lo que al contar con la inestabilidad que nos proporciona el agua, nos obligará a fortalecer mucho más nuestro core)... En función de cuál sea nuestro objetivo, deberemos optar por uno u otro tipo.
GAP: glúteos, abdominales y pierna
Las clases colectivas de GAP son una de las que más éxito suelen tener entre el público femenino, debido principalmente a que son las zonas que más buscan tonificar.
Con una duración que no suele exceder de los 30 minutos (40-45 como mucho), única y exclusivamente vamos a trabajar estos tres grupos musculares, por lo que para algunas personas es un muy buen complemento para realizar después de su rutina de pesas habitual. El objetivo, como ya hemos dicho, es tonificar estas tres zonas.
Aeróbic, zumba, batuka y step
Si lo que te gusta es la diversión, el movimiento y la música, estas clases sin duda son las más recomendables para ti. Basadas en un trabajo fundamentalmente aeróbico en el que nuestro sistema y capacidad cardiorrespiratoria serán puestos a prueba, clases como el aeróbic o el zumba nos harán sudar esos polvorones y ese roscón que nos hemos comido.
Además, por lo general suelen ser clases colectivas en las que reina un gran ambiente de compañerismo y tanto profesores como usuarios están dispuestos a echarte una mano. Diversión, música y entretenimiento. ¿Alguien da más?
Imágenes | iStock
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La noticia Las clases colectivas que te ayudan a quemar el turrón fue publicada originalmente en Vitónica por Miguel Fitness .
via Vitónica https://www.vitonica.com/entrenamiento/las-clases-colectivas-que-te-ayudan-a-quemar-el-turron
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